Los mejores vinos para maridar pizzas
Tradicionalmente no se suele combinar a la pizza con vinos, muchas veces por costumbre o porque se subestima el hecho de que un plato tan simple como la pizza pueda estar asociado a la cocina gourmet. Sin embargo, las viejas tradiciones pueden modificarse para transformarse en nuevas y la combinación de pizza con vino -así como con champagne- puede ser más que interesante.

Estamos convencidos que el gusto por el vino es hoy una tendencia que gana cada día más seguidores y acompañada con un buen pedazo de pizza hace parte de los planes familiares o de amigos que más nos gustan.
El maridaje perfecto puede ser un vino sugerido, pero el truco radica cuando se selecciona un vino que no opaque el sabor de la comida o una comida que le reste protagonismo al vino.
Maridaje de pizzas típicas
Para una pizza con salsa de tomate y mozarrella, jamón u otros ingredientes comunes hay que tener en cuenta la acidez de por sí predominante de la salsa de tomate antes de elegir el vino adecuado. Por eso se recomiendan vinos frutales que combinen bien con esas características y con una acidez baja para que no se mezcle con la de los ingredientes.

Entre los vinos que funcionan muy bien con las pizzas más tradicionales se encuentran un Syrah de cuerpo medio, que va muy bien con el contenido graso de la mozarella o el queso, sobre todo los fuertes y aromáticos como el queso azul o un provolone.
En el caso de un Sauvignon Blanc, resulta perfecto para resaltar los sabores de hierbas como el orégano o la rúgula y va muy bien con pizzas de vegetales con cebolla, aceitunas u hongos o por qué no, un Malbec si el sabor de la pizza es fuerte.
Unos de los que quizás mejor combinen: el Bonarda, que con sus notas de ciruelas y moras y sus taninos robustos dan ese toque frutal necesario.
Pizzas menos tradicionales
La pizza blanca puede estar compuesta por diferentes quesos, salsa bechamel, oliva y otros aderezos como espinacas, calabacines, pero su característica fundamental es que no lleva salsa de tomate, por lo que las opciones para acompañarla pueden ser más amplias.

Un Sauvignon Blanc, Pinot Gris e incluso algún vino espumante son opciones para tener en cuenta que van muy bien.
Para las pizzas que llevan algún tipo de frutos de mar -como camarones- o mariscos -como anchoas- quedan muy bien acompañadas con vinos como el Chardonnay. Lo mismo con algún pescado como el salmón.

Recuerda qué
El vino rosé o rosado se debe servir muy frío, su sabor contrasta con los del queso fundido y caliente.Vino y pizza el mejor plan de amigos
Los vinos jóvenes son perfectos por sus características frutales y sencillas para quienes empiezan a conocer de vinos y por sus precios.
El vino blanco se debe servir a 6 u 8 grados centígrados para poder sentir sus propiedades.
Los vinos jóvenes vienen con tapa de rosca que permiten mayor hermetismo y que el vino tenga las características que el enólogo quiere darle. En el caso de los corchos, estos no son sinónimo de calidad.
Oler el corcho, no denota experticia en vinos.
Los vinos jóvenes tienen tiempos limitados, después de su fecha de cosecha se deben consumir en los dos o tres años siguientes.
Cuando los vinos tienen barricas de roble o madera, tienen aromas terciarios a especias, a pimienta, por ejemplo.
La tendencia permite que puedas comer un pescado con un vino rosé o uno tinto, dependiendo de la fuerza de la salsa.
¿Has probado maridar la pizza con vino? ¿Qué estas esperando? Cuéntanos tu experiencia en los comentarios.